Familiares de víctimas de ejecuciones extrajudiciales por militares durante la «guerra sucia» de México han presentado una denuncia y ahora los cuerpos de las víctimas serán exhumados.

Octaviano Gervasio Serrano, presidente del Colectivo de Esposas e Hijos de Desaparecidos y Desplazados de la Guerra Sucia, anunció que se exhumarán los restos de al menos ocho personas que fueron baleadas y enterradas en fosas comunes en Guerrero, entre ellas una de 15 años -viejo niño.

Familiares de desaparecidos de las décadas de 1960, 1970 y 1980 han informado que los militares borraron las identidades civiles de las víctimas, por lo que sus nombres no aparecen en el Registro Civil de Guerrero.

Los militares obligaron a los familiares a presenciar el asesinato antes de arrojar los cuerpos en fosas comunes.

Después de las pruebas genéticas, los restos recibirán un entierro adecuado.

Esta denuncia de un grupo de familias contra los militares ejemplifica las atrocidades que los militares cometieron contra el pueblo de Guerrero con el pretexto de detener a los

grupos guerrilleros. La denuncia también destaca que el ejército fue el principal responsable de las desapariciones y asesinatos de personas. La denuncia fue presentada el 21 de abril y el grupo está a la espera de que el tribunal ordene la exhumación.